Sintoniza en directo

Evangelio de cada día

Visita tambien...

viernes, 11 de junio de 2010

Viernes 10ª del tiempo ordinario. Ciclo C. Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús


Misa 
Comentarios, Autor: Pedro Sergio Antonio Donoso Brant 
SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

La devoción al Corazón de Jesús ha existido desde los primeros tiempos de la Iglesia, al meditar en el costado y el Corazón abierto de Jesús en la cruz, de donde brotó sangre y agua. De ese Corazón nació la Iglesia. Esta devoción se incrementó luego de las visiones que recibió la religiosa francesa Santa Margarita María de Alacoque, visiones en las cuales Jesucristo le pide una fiesta para honrarlo con la comunión y los actos de reparación. La primera fiesta del Sagrado Corazón se celebró en el Convento de la Visitación en Francia en 1686.

ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 32, 11. 19

Los proyectos de su corazón subsisten de edad en edad, para librar sus vidas de la muerte y reanimarlos en tiempo de hambre

Se dice Gloria a Dios.

ORACIÓN COLECTA

Padre todopoderoso y eterno, que has dado a tu Iglesia el gozo inmenso de la resurrección de Jesucristo; concédenos también la alegría eterna del reino de tus elegidos, para que así el humilde rebaño de tu Hijo tenga parte en la admirable victoria de su Pastor. Por nuestro Señor Jesucristo.

PRIMERA LECTURA Ez 34, 11-16
Lectura de la profecía de Ezequiel.

Así habla el Señor: ¡Aquí estoy yo! Yo mismo voy a buscar mi rebaño y me ocuparé de él. Como el pastor se ocupa de su rebaño cuando está en medio de sus ovejas dispersas, así me ocuparé de mis ovejas y las libraré de todos los lugares donde se habían dispersado, en un día de nubes y tinieblas. Las sacaré de entre los pueblos, las reuniré de entre las naciones, las traeré a su propio suelo y las apacentaré sobre las montañas de Israel, en los cauces de los torrentes y en todos los poblados del país. Las apacentaré en buenos pastizales y su lugar de pastoreo estará en las montañas altas de Israel. Allí descansarán en un buen lugar de pastoreo, y se alimentarán con ricos pastos sobre las montañas de Israel. Yo mismo apacentaré a mis ovejas y las llevaré a descansar –oráculo del Señor–. Buscaré a la oveja perdida, haré volver a la descarriada, vendaré a la herida y sanaré a la enferma, pero exterminaré a la que está gorda y robusta. Yo las apacentaré con justicia.
Palabra de Dios.

COMENTARIO

Yo mismo vengo en busca de mis ovejas. Ahora los jefes de Israel han desaparecido en la catástrofe de su país, y Yahvé promete hacerse pastor. Con esta ocasión dice cuáles son los deberes del pastor: reunir, proteger, dar alimento a todos y corregir a los prepotentes.

SALMO Sal 22, 1-6

R. El Señor es mi pastor, nada me puede faltar.

El Señor es mi pastor, nada me puede faltar. Él me hace descansar en verdes praderas, me conduce a las aguas tranquilas y repara mis fuerzas.

R. El Señor es mi pastor, nada me puede faltar.

Me guía por el recto sendero, por amor de su Nombre. Aunque cruce por oscuras quebradas, no temeré ningún mal, porque tú estás conmigo: tu vara y tu bastón me infunden confianza.

R. El Señor es mi pastor, nada me puede faltar.

Tú preparas ante mí una mesa, frente a mis enemigos; unges con óleo mi cabeza y mi copa rebosa.

R. El Señor es mi pastor, nada me puede faltar.

Tu bondad y tu gracia me acompañan a lo largo de mi vida; y habitaré en la Casa del Señor, por muy largo tiempo.

R. El Señor es mi pastor, nada me puede faltar.

SEGUNDA LECTURA Rom 5, 5b-11
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Roma.

Hermanos: El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que nos ha sido dado. En efecto, cuando todavía éramos débiles, Cristo, en el tiempo señalado, murió por los pecadores. Difícilmente se encuentra alguien que dé su vida por un hombre justo; tal vez alguno sea capaz de morir por un bienhechor. Pero la prueba de que Dios nos ama es que Cristo murió por nosotros cuando todavía éramos pecadores. Y ahora que estamos justificados por su sangre, con mayor razón seremos librados por él de la ira de Dios. Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más ahora que estamos reconciliados, seremos salvados por su vida. Y esto no es todo: nosotros nos gloriamos en Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo, por quien desde ahora hemos recibido la reconciliación.
Palabra de Dios.

COMENTARIO

La esperanza tiene un lugar privilegiado en el comportamiento cristiano, pero se trata de una esperanza fundada, no de ilusión vacía. Como todo mortal, el discípulo de Cristo es constitutivamente un “proyecto” personal y colectivo, es decir, toda su existencia es atraída por el fin de la historia de la humanidad. Así el misterio pascual de Cristo constituye, a sus ojos, la garantía irrecusable de que su esperanza no es vana.

ALELUYA Jn 10, 14

Aleluya. “Yo soy el Buen Pastor: conozco a mis ovejas, y mis ovejas me conocen a mí”, dice el Señor. Aleluya.

EVANGELIO Lc 15, 3-7
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.

Jesús dijo a los fariseos y a los escribas esta parábola: Si alguien tiene cien ovejas y pierde una, ¿no deja acaso las noventa y nueve en el campo y va a buscar la que se había perdido, hasta encontrarla? Y cuando la encuentra, la carga sobre sus hombros, lleno de alegría, y al llegar a su casa llama a sus amigos y vecinos, y les dice: “Alégrense conmigo, porque encontré la oveja que se me había perdido”. Les aseguro que, de la misma manera, habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta, que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse.
Palabra del Señor.

COMENTARIO

Una imagen de la misericordia de Dios es la búsqueda incansable de la oveja perdida, seguida de la alegría del reencuentro. Si la palabra misericordia no tiene buena prensa en la medida en que evoca, sin razón, una acogida paternalista y sentimental, la realidad que expresa es quizás lo que hay de más sorprendente en Dios. La misericordia es el amor llevado al extremo de sí mismo. No debe extrañarnos de que sus manifestaciones resulten desconcertantes a los pecadores que somos nosotros. Que Dios sea Dios y pierda en cierto sentido su tiempo, por una oveja perdida, ¿acaso no es asombroso?

Se dice el Credo

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Mira, Padre, el amor del Corazón de tu Hijo, que se entregó a la muerte por nosotros, para que nuestra participación en esta Eucaristía te sea agradable y sirva para la reparación de nuestros pecados. Por Jesucristo nuestro Señor.

PREFACIO

EL INMENSO AMOR DE CRISTO

V/. El Señor esté con ustedes.

R/. Y con tu espíritu.

V/. Levantemos el corazón.

R/. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

V/. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.

R/. Es justo y necesario.

En verdad es justo y necesario es nuestro deber y salvación, darte gracias, siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno.

Porque Cristo, nuestro Señor, con amor inmenso se entregó por nosotros a la muerte de cruz.

Elevado en ella, hizo brotar sangre y agua de su Corazón traspasado, para dar vida a la Iglesia y eficacia a sus sacramentos; y así, todos los hombres, atraídos hacia su Corazón abierto, saciaran su sed de gozo perenne, en la fuente del amor y de la salvación.

Por eso, con los santos y los ángeles, te alabamos, diciendo (cantando) sin cesar. Santo, Santo, Santo...

ANTÍFONA DE COMUNIÓN Jn 7, 37-38

Dice el Señor: El que tenga sed, venga a mí; y beba el que cree en mí. De su seno brotarán manantiales de agua viva.

O bien:

Uno de los soldados atravesó el costado con la lanza, y en seguida brotó sangre y agua.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Este sacramento de tu amor, Padre nuestro encienda en nosotros el fuego de la caridad que nos mueva a unirnos más a Cristo y a reconocerlo presente en nuestros hermanos. Por Jesucristo nuestro Señor.

+++++++++++++++++++++

REFLEXIÓN BÍBLICA

“Habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta, que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse”

Lc 15, 3-7

Autor: Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

Ninguno de nosotros ha visto a Jesucristo, y todas las imágenes que de El existen, son una creatividad que en muchos casos, son parte del amor que le tenemos, entonces pensamos que debe haber sido así o parecido. Pero si nos ponemos a reflexionar sobre la personalidad de Jesucristo, de cómo era, como hablaba o se acercaba a las gentes, tenemos que concluir que debe haber sido muy atrayente, y haber tenido unos ojos cautivantes, considerando que los evangelios revelan que miraba el corazón de los hombres. Jesús, debió de tener una presencia agradable, amable para que muchos acudieran a Él, y le llevaran niños para que les impusiera las manos; unos modales dignos que inspiraban el afecto de personas de toda condición; una mirada que removió a los Apóstoles para que lo siguieran dejando todas las cosas

En efecto, la forma de hablar y dirigirse a las gentes debe haber sido impactante y con un gran atractivo, con un especial magnetismo para las personas y, por lo que hemos leído en los Evangelios, todos querían acercársele, tocar su manto e incluso se conformaban con tocar la sombra del Señor. Aún más, Jesucristo buscaba estar con las gentes y sin ninguna discriminación. Es así, como se acercaban a El todos los publícanos y pecadores para oírle, y los fariseos y escribas murmuraban, diciendo: Este acoge a los pecadores y come con ellos.

Escribe Lucas (15;1):Todos los publicanos y los pecadores se acercaban a él para oírle. Así es, se acercan a quien es solo misericordia. Estos publícanos y pecadores — gentes que no se preocupaban de la pureza “legal” farisaica — acudían a Cristo para oírle, para aprender, para saborear la Palabra del Señor y, esto levantó, una vez más, la censura de los fariseos y escribas para murmurar de El, porque comía y acogía a los pecadores. Pero la respuesta de Cristo la articula Lucas en esta parábola que tiene por finalidad mostrar la misión y el gozo de Cristo por salvar a los pecadores.

Del mismo modo como en esta bella parábola el pastor busca la oveja perdida, Jesús busca al pecador, es la prueba clara de que es voluntad de Dios que no se pierda ninguno de sus hijos. El tema directamente es la misericordia de Dios sobre el pecador. Esta es tal, que Dios no sólo ofrece el perdón, sino que tiene sobre él una misericordia dinámica: lo “busca” de mil maneras, “hasta” que halle a esta oveja perdida. Y se confirma por el “gozo” en el cielo.

Luego el traerla sobre sus hombros es un detalle más del gozo de Dios por el pecador convertido. El rasgo de convocar a “amigos y vecinos,” para que se “alegren” con él por el hallazgo, es un rasgo parabólicamente irreal, pero que en su mismo uso indica una finalidad superior. Y ésta es la solicitud y gozo de Dios en la busca y conversión del pecador. Como en los grandes éxitos familiares se convida, para celebrarlos, a la vecindad y los amigos

Esta parábola no solo subraya la idea de buscar, es mas profundo, se quiere destacar la alegría de encontrar. Y aun este gozo por la conversión del pecador cobra un nuevo rasgo y una nueva perspectiva: su eco en el cielo. La frase que en el cielo “será mayor la alegría” por un pecador que se convierta que por noventa y nueve justos que no necesitan conversión, es una paradoja. Sin duda, Dios no ama menos a los justos que al pecador arrepentido; pero a este pecador Dios lo ha buscado, perseguido con su gracia, como el pastor ha hecho con su oveja, y el resultado, la conversión, da a Dios una ocasión de alegría que no le ofrecen los justos. Hasta se diría que, usándose aquí de un antropomorfismo, “la fidelidad de los justos produce una alegría discreta, completamente íntima; pero la conversión de los pecadores causa un alegría inmensa.

Cristo ha venido a establecer y a instituir la gracia, el sabe de misericordia, ha venido a reconciliarnos con el Padre, Jesús perdona de corazón, a todo aquel que se arrepiente, y como sabemos el solo pide, no pecar mas. Pidámosle al Señor, contagiarnos de esa natural inclinación a la bondad, a la compasión y a la misericordia que el tiene, y aprendamos de El, que se sienta a comer con todos si discriminar a los hombres por su origen o por su faltas. El es el único maestro del cual debemos aprender, al el debemos seguir y nosotros somos todos hermanos iguales ante los ojos de Dios

Que Cristo Jesús viva en sus corazones

Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

ÁNIMOS DE QUIENES ACUDEN A ÉL PORQUE ES SENCILLO Y HUMILDE DE CORAZÓN

Dios envía a su Hijo unigénito y dona el Espíritu Santo porque Dios es amor; nos ama enormemente y, a través del envío del Hijo y el don del Espíritu, se manifiesta como amor, caridad, ágape. En el texto evangélico, Dios revela los misterios del Reino a los pequeños, y no a los sabios y entendidos, porque los ama. Jesús repone los ánimos de quienes acuden a él porque es sencillo y humilde de corazón, porque es amable y ama.

El centro y el vértice de la fiesta litúrgica del Corazón de Jesús está en el culto al amor salvífico por nosotros; en él se encuentra la raíz de todas las gracias, de todos los favores, de todas las bondades que continuamente recibimos. Sobre todo, el don de la vida divina, de la filiación divina a través del bautismo, perfeccionada en la confirmación, nutrida en la eucaristía, recobrada en el perdón y vertida abundantemente en todos los sacramentos que derivan de la pasión y muerte de Cristo, el acto supremo de amor, ya que «nadie tiene amor más grande que quien da la vida por sus amigos» (Jn 15,13).

ORACION

Y tanto amaste al mundo, Padre santo, que, al cumplirse la plenitud de los tiempos, nos enviaste como salvador a tu único Hijo. El cual se encarnó por obra del Espíritu Santo, nació de María, la Virgen, y así compartió en todo nuestra condición humana, menos en el pecado; anunció la salvación a los pobres, la liberación a los oprimidos, y a los afligidos el consuelo. Para cumplir tus designios, él mismo se entregó a la muerte y, resucitando, destruyó la muerte y nos dio nueva vida. Y porque no vivamos ya para nosotros, sino para él, que por nosotros murió y resucitó, envió, Padre, al Espíritu Santo como primicia para los creyentes, a fin de santificar todas las cosas, llevando a plenitud su obra en el mundo (plegaria eucarística IV).

No hay comentarios: